Las excelentes noticias que han llegado sobre la incorporación del Protocolo y el Ceremonial a los estudios de la Universidad Camilo José Cela de Madrid, me han llevado a pensar con bastante envidia en la posibilidad que se ofrece ahora a quienes desean estudiar seriamente nuestras disciplinas. Digo con envidia porque en Argentina no han recibido hasta ahora ese tratamiento dignísimo.
Para ser sincero debo decir que en el país existen tres universidades que ofrecen las llamadas “tecnicaturas universitarias en Protocolo y Ceremonial”. Ellas se pueden cursar en las provincias de Buenos Aires, Mendoza y Tucumán. Las disposiciones legales exigen que las “tecnicaturas” sean presentadas con anticipación necesaria ante el Ministerio de Educación nacional con sede en Buenos Aires. Ese organismo es el que otorga la autorización para que funcionen y puedan otorgar títulos. Para ingresar es necesario haber aprobado los estudios de bachillerato o de nivel medio. El programa comprende tres años para cursar en ellos las asignaturas de la carrera.
Sin embargo, aunque las tres universidades que poseen esas tecnicaturas aspiran a ofrecer posteriormente a sus egresados una licenciatura, todavía no la han implementado.
En Argentina los grados universitarios son cuatro: licenciado, especialista, magíster y doctor. Las tecnicaturas aunque dan diplomas universitarios son otros estudios completamente diferenciados de las denominadas “diplomaturas” modalidad que otorga un simple certificado de asistencia a quienes la han cursado.
Existen también estudios a nivel terciario. Ellos se pueden hacer después de haber aprobado los niveles primario y secundario pero que no son supervisados por el ministerio de Educación Nacional. El Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, por ejemplo, brinda estudios terciarios y ejerce un control sobre los mismos.
En los últimos años he podido comprobar un interés mayor para los estudios de Protocolo y Ceremonial.
Así recuerdo que Carlos Fuente impartió un curso de Protocolo en la Empresa para un buen número de profesionales. En tanto la Universidad de Oviedo en convenio con la argentina Austral ofreció el posgrado de “Experto universitario en Protocolo y Ceremonial”. Don Felio A. Vilarrubias junto a un grupo grande profesores argentinos fueron lo encargados de dar las clases. Los exámenes orales fueron en Buenos Aires y las tesinas se calificaron en España.
Junto a tantas noticias positivas debo también expresar mi estupor ante el anuncio de determinados cursos de Protocolo y Ceremonial. En Argentina se inicia en estos días el año académico que finalizará en diciembre y aprecio avidez para formarse en nuestras disciplinas. Sin embargo no es posible que en un programa televisivo se anuncien temas protocolares y se ofrezca después una charla donde la persona que lo dictó al referirse al uso de los cubiertos en la mesa se permitió decir que ese lenguaje era para los tiempos en lo cuales quienes atendían el servicio de la mesa tenían prohibido hablar con los comensales. ¿Habrá ese profesor participado de algún banquete? Es la pregunta que me hice de inmediato ante el improvisado maestro y con un poco de juicio crítico apunté a su falta de roce social que es imprescindible en Protocolo.
En fin, hay mucho por hacer y por aprender. Personalmente admiro a España y a todo lo que se ha hecho y se hace por el Protocolo. Sé también que “en todas partes se cuecen habas”, y casos habrá que se acerquen a sus parientes argentinos.
Sueño con su incorporación universitaria en Argentina. Terminarán entonces los cursos “truchos” –falsos en el lenguaje cotidiano - y quedará al descubierto que no se puede otorgar un diploma de “Maestro de Ceremonias” a quienes hayan asistido a doce charlas sobre diversos temas que versan solamente sobre temas lejanos a lo que hay que enseñar y aprender en Protocolo y Ceremonial.
Roberto Sebastián Cava
Especialista en Protocolo y Ceremonial